¿Te has mirado alguna vez en el espejo y has notado esos pequeños granitos blancos o rojos en tu lengua? No te preocupes, no estás solo. Los granos en la lengua, también conocidos como papilitis lingual transitoria, son una afección común que puede afectar a personas de todas las edades.
En este artículo, vamos a desentrañar los misterios de estos granitos: qué son, por qué salen y cómo puedes deshacerte de ellos.
¿Qué son los granos en la boca?
Los granos en la lengua, también conocidos como papilitis lingual transitoria, son pequeñas protuberancias rojas o blancas que aparecen en la superficie de la lengua. Estas protuberancias, que pueden ser dolorosas o sensibles al tacto, están causadas por la inflamación de las papilas gustativas, los pequeños bultos que recubren la lengua y que nos permiten saborear los alimentos.
La papilitis lingual transitoria es una afección inofensiva que suele desaparecer por sí sola en cuestión de días o semanas. Sin embargo, puede ser molesta y dificultar la comida o el habla.
¿Por qué aparecen los granos en la lengua?
Para comprender por qué aparecen los granos en la lengua, es esencial identificar la causa de esta condición. Su nombre médico es papilitis lingual transitoria, y se origina por la inflamación de las papilas fungiformes ubicadas en la lengua. Los motivos o factores que desencadenan esta inflamación pueden ser muy variados.
Síntomas de los granos en la boca
Los granos en la boca pueden presentar diversos síntomas, entre los cuales se incluyen:
- Pequeñas protuberancias: aparecen en la lengua, generalmente en la punto o los lados, y pueden ser rojas, blancas o amarillas.
- Dolor o sensibilidad: la lengua puede sentirse adolorida, sensible o incluso quemada, especialmente al contacto con alimentos picantes, ácidos o duros.
- Inflamación: las papilas fungiformes inflamadas pueden provocar una sensación de hinchazón en la lengua.
- Ardor o picazón: una sensación de ardor o picazón puede acompañar a las protuberancias, intensificando la molestia.
- Dificultad para masticar o tragar: en algunos casos, la inflamación y el dolor pueden dificultar la masticación o la deglución.
- Cambio en el sabor: el sentido del gusto puede verse alterado temporalmente durante la papilitis lingual transitoria.
Causas de los granos en la boca
La causa exacta de los granos en la lengua se desconoce, pero se cree que está relacionada con una serie de factores, entre ellos:
- Irritación: morderse la lengua, comer alimentos picantes o ácidos, fumar o usar dentaduras postizas mal ajustadas pueden irritar las papilas gustativas de la lengua y provocar la aparición de papilitis lingual transitoria.
- Estrés: el estrés puede debilitar el sistema inmunológico y hacer que el cuerpo sea más susceptible a las infecciones, incluida la papilitis lingual transitoria.
- Cambios hormonales: las mujeres son más propensas a padecer granos en la lengua que los hombres, especialmente durante el embarazo o la menstruación. Esto se debe a que los cambios hormonales pueden afectar el flujo sanguíneo a la lengua.
- Deficiencias nutricionales: algunas deficiencias nutricionales, como la falta de vitamina B12 o ácido fólico, pueden provocar granos en la lengua.
- Ciertos medicamentos: algunos medicamentos, como los antibióticos, pueden provocar papilitis lingual transitoria como efecto secundario.
- Infecciones: en algunos casos, la papilitis lingual transitoria puede ser causada por una infección viral o bacteriana.
¿Cómo eliminar los granos en la lengua?
Si bien los granos en la lengua suelen desaparecen por sí solos en cuestión de días o semanas, existen algunos remedios caseros que pueden ayudarte a aliviar los síntomas y acelerar la recuperación:
- Enjuague de agua salada: disuelve una cucharadita de sal en un vaso de agua tibia y enjuaga la boca durante 30 segundos varias veces al día. La sal tiene propiedades antibacterianas y antiinflamatorias que pueden ayudar a reducir la irritación y el dolor.
- Enjuague de bicarbonato de sodio: mezcla una cucharadita de bicarbonato de sodio en un vaso de agua tibia y enjuaga la boca durante 30 segundos varias veces al día. El bicarbonato de sodio puede ayudar a neutralizar los ácidos de la boca y aliviar la molestia.
- Enjuague de manzanilla: prepara una infusión de manzanilla, deja que se enfríe y úsala como enjuague bucal varias veces al día. La manzanilla tiene propiedades calmantes y antiinflamatorias que pueden ayudar a reducir la irritación.
- Chupar hielo: chupar trozos de hielo o caramelos de hielo puede ayudar a adormecer la lengua y aliviar temporalmente el dolor.
- Analgésicos: puedes tomar analgésicos de venta libre como ibuprofeno o paracetamol para aliviar el dolor y la inflamación.
¿Cómo prevenir los granos en la lengua?
Los granos en la lengua pueden ser una experiencia desagradable. Pero no te preocupes, ¡hay medidas que puedes tomar para prevenirla!
- Cepillado y uso de hilo dental: cepilla tus dientes tres veces al día y usa hilo dental para eliminar las bacterias y la placa que irritan la lengua.
- Hilo dental: no olvides usar hilo dental una vez al día para limpiar entre los dientes y eliminar la placa que puede irritar la lengua.
- Enjuague bucal: complementa tu higiene con un enjuague bucal antiséptico para combatir las bacterias y refrescar el aliento.
- Evita irritantes: reduce el consumo de alimentos picantes, ácidos, duros o crujientes que puedan dañar las papilas gustativas.
- Hidratación constante: bebé abundante agua durante el día para mantener la boca húmeda y prevenir la sequedad.
- Vitaminas y minerales: asegúrate de consumir alimentos ricos en vitamina B12 y ácido fólico, esenciales para la salud lingual.
- Controla el estrés: el estrés debilita el sistema inmunológico, haciéndote más propenso a infecciones como la papilitis lingual transitoria. Practica técnicas de relajación como yoga o meditación.
- Adiós al tabaco: fumar irrita la lengua y aumenta el riesgo de padecer esta afección.
- Modera el alcohol: el consumo excesivo de alcohol también irrita la lengua.
- Visitas regulares al dentista: acude al dentista para revisiones periódicas y limpiezas profesionales que detecten y traten a tiempo cualquier problema bucal.
Es importante destacar que estos remedios caseros no sustituyen la atención médica. Si tienes papilitis lingual transitoria, consulta a un médico o dentista para obtener un diagnóstico y un plan de tratamiento adecuados.