El objetivo de las carillas dentales es transformar tanto el tamaño, como el color, la forma o la posición de los dientes para conseguir una dentadura perfecta y armónica. Se colocan con rapidez y su resultado es muy eficaz en comparación con otros tratamientos de estética dental.
Las carillas dentales son finas láminas cosméticas que se colocan en la parte vestibular o delantera de los dientes. Su función principal es transformar el aspecto estético de la dentadura gracias a unos materiales de alta calidad que imitan a la perfección un diente natural.
Las carillas dentales se han convertido en uno de los tratamientos más frecuentes, ya que permite unos resultados eficaces en muy poco tiempo. Además no requiere de cirugía por lo que no suponen ningún tipo de molestia.
Todos sabemos que la belleza es algo subjetivo, depende de muchos factores diferentes como los gustos o la cultura, pero existen unos cánones estéticos comúnmente aceptados. En lo referente a la estética bucodental, esto son algunos de los rasgos de los dientes perfectos:
La elección del tipo de carilla dental depende de las necesidades del paciente, la ubicación de los dientes a tratar, el presupuesto y las recomendaciones del dentista. Cada tipo de carilla tiene sus ventajas y consideraciones específicas, por lo que es importante discutir las opciones con un profesional dental para tomar la decisión más adecuada.
Son fabricadas a medida en laboratorios dentales, estas carillas se caracterizan por su excepcional durabilidad y su capacidad para ofrecer una apariencia natural. Requieren una cantidad mínima de desgaste del esmalte dental y son altamente resistentes a las manchas, manteniendo su color original con el tiempo. Su acabado translúcido imita la estética de los dientes naturales, proporcionando una solución estética de alta calidad. Aunque la colocación de carillas de porcelana suele requerir dos visitas al dentista, los resultados son duraderos y satisfactorios.
También son conocidas como carillas directas o de resina, y se fabrican y aplican en el consultorio dental en una sola visita. Estas carillas son una opción más económica en comparación con las de porcelana, y a pesar de ser menos costosas, ofrecen una mejora significativa en la estética dental. Requieren una mínima preparación del esmalte dental natural y son fáciles de reparar o retocar en caso de daño o desgaste con el tiempo. Su versatilidad y capacidad para lograr una apariencia natural las convierten en una elección popular para aquellos que buscan una solución estética rápida y efectiva.
Son conocidas por su resistencia y durabilidad. Se utilizan en situaciones en las que se requiere una mayor capacidad de resistencia, como en los dientes posteriores, manteniendo una estética muy delgada, lo que minimiza la necesidad de preparación del diente natural.
Se fabrican a partir de un material extremadamente resistente y duradero, ideal para dientes posteriores o cuando se necesita una mayor resistencia, pero se quiere cuidar la apariencia estética. Son una elección popular para aquellos que buscan tanto una gran capacidad para soportar fuerzas masticatorias considerables como belleza en su sonrisa.
Son las carillas con mejores propiedades tanto estéticas como ópticas. A través de ellas conseguimos resultados totalmente naturales que imitan a la perfección el esmalte dentario. Además son muy resistentes ya que presentan valores de resistencia a la fractura más altos que el propio esmalte dentario natural.
Antes de comenzar cualquier tipo de tratamiento, en la Clínica dental Dentinos realizamos una revisión completa de la salud bucodental de nuestros pacientes, y ofrecemos un diagnóstico y un plan de tratamiento personalizados. Las carillas dentales son una buena opción para conseguir la sonrisa que deseas en pocas sesiones y se recomiendan cuando:
El odontólogo realiza una evaluación dental completa, discute las expectativas del paciente y decide si las carillas son adecuadas. Se toman radiografías y fotografías de los dientes para planificar el tratamiento.
Se elimina una pequeña cantidad de esmalte dental de la superficie frontal de los dientes, creando espacio donde se adheriran de manera segura las carillas. Y se toman impresiones de los dientes preparados para crear un modelo dental para fabricar las carillas.
En el laboratorio dental, se fabrican las carillas de porcelana o composite a medida, basadas en el modelo dental y las especificaciones del paciente. El color y la forma de las carillas se eligen cuidadosamente para lograr la apariencia deseada.
Se prueban en los dientes para asegurar que se ajustan correctamente y cumplen con las expectativas del paciente. Después, se adhieren permanentemente a la superficie de los dientes utilizando un adhesivo dental especial y una luz de polimerización.
El odontólogo realiza ajustes finales para garantizar que las carillas encajen cómodamente y que la mordida sea adecuada. Las carillas y los dientes se pulen para obtener un resultado suave y natural.
Las carillas dentales pueden ser un tratamiento muy duraderos siempre que se haga un buen uso de ellas. Para ello es muy importante mantener unas buenas rutinas de higiene bucodental, además de visitar al dentista periódicamente.
Para que las carillas dentales duren el máximo tiempo posible es importante que no las sobrecargues o realices un uso poco seguro, pues podrían romperse, despegarse o fracturarse. Si una carilla se desprende, se puede volver a colocar sin problemas. Pero cuando se produce una rotura, será necesario colocar una carilla nueva.
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